Tranquilos que no voy a hablar de aquí del test de resistencia física consistente en correr cuanto se pueda como un cobarde durante doce minutos. De ese odioso test de origen militar que martirizó nuestras infanto-juveniles clases de Educación Física. Para mí el Test de Cooper es la prueba fehaciente de que por fin Cooper, ese grupo musical, dejan de ser “el secreto mejor guardado del pop español”.
Optimista vengo, ya lo sé, ¿sabéis quién son Cooper? Posiblemente no, y no digo que deberíais, pero sí os diré una cosa: su último lanzamiento, el EP Lemon Pop (2008), ha sido número uno en ventas de la lista de singles de este país. No está mal, ¿no? Gente como la buena vida también fueron número uno de singles en su día y nadie se enteró, pero eso es así porque en España los discos de moda los dictan las radiofórmulas, y van completamente independientes de quién venda más o menos. ¿Os imagináis eso en USA o Gran Bretaña? Pues así es aquí.
Por si esto fuera poco, su anterior trabajo (el EP Guárdame un secreto, 2007) llegó al número 2 en esa misma lista. Eso significa que alguien sí que debe comprar los discos de Cooper, ¿no? (aparte de servidor, claro). Algunos modernos. Antes de los citados, Cooper habían sacado otro soberbio EP: Días de cine (2006), y así nos van haciendo entrega de su producción con cuenta gotas. En 2004 salió una colección –Retrovisor- que venía a juntar canciones de los tres previos singles de la banda, aparecidos entre 2003 y 2004. ¿Pero es que esta gente no sacan discos normales? ¿Álbumes?
Cooper debutaron en el año 2000 con el estupendísimo Fonorama, y luego Retrovisor puede considerarse un disco a posteriori, pero hace un par de años escuché a su líder y factótum, Alejandro Díez, decir en una entrevista de Radio 3 que él ya estaba harto del dictado de la industria discográfica y que pasaba de la presión de tener que “dar a luz” un disquito entero cada dos o tres años. Así, el buen hombre argumentaba que lo que pensaba hacer era editar singles o EPs cuando le viniese en gana (sospecho que no vive de esto) y que ya si eso luego la casa de discos (Elefant Records) reuniese las canciones “de éxito” en formato grande. Y esto, amigos, en los tiempos que corren, es tener un par de huevos.
Lo de singles convertidos en discos no es el invento de la pólvora, era lo estándar en el mundo del rock hasta que llegaron los Beatles. Los singles que Cooper facturan son verdaderos EPs de cuatro canciones, casi siempre viene una versión (de Gigolo Aunts, The Muffs, Myracle Brah…) adaptada o no al castellano. Este Alex Díez no viene de la nada, era el cantante del grupo revival mod ochentero Los Flechazos, que igual os suena más. Hoy día los auténticos mods lo repudian (uno me llegó a decir el año pasado “¿Cooper, mod? Su rollo no tiene nada que ver con el nuestro”).
Los Flechazos eran retro retro, es decir, imitaban la música de los años 60, pop, surf, beat, rock de garaje… Cooper hacen power pop, es decir, pop de guitarras deudor del de aquella época, pero no fotocopiado.
En este último EP, además de los cuatro temas de rigor, Cooper nos ofrecen una sorpresa (y por eso creo yo que se ha vendido tanto). Se trata de una quinta “pista oculta” de una hora de duración que contiene un concierto en la sala madrileña Gruta 77. El menú: la crema del pop, versiones de los grupos citados dos párrafos más arriba más Badfinger, Raspberries, The Hollies, Buzzcocks, The Smithereens, Evan Dando, Nacha Pop o los propios Flechazos. Todo por menos de 5 euros.
Optimista vengo, ya lo sé, ¿sabéis quién son Cooper? Posiblemente no, y no digo que deberíais, pero sí os diré una cosa: su último lanzamiento, el EP Lemon Pop (2008), ha sido número uno en ventas de la lista de singles de este país. No está mal, ¿no? Gente como la buena vida también fueron número uno de singles en su día y nadie se enteró, pero eso es así porque en España los discos de moda los dictan las radiofórmulas, y van completamente independientes de quién venda más o menos. ¿Os imagináis eso en USA o Gran Bretaña? Pues así es aquí.
Por si esto fuera poco, su anterior trabajo (el EP Guárdame un secreto, 2007) llegó al número 2 en esa misma lista. Eso significa que alguien sí que debe comprar los discos de Cooper, ¿no? (aparte de servidor, claro). Algunos modernos. Antes de los citados, Cooper habían sacado otro soberbio EP: Días de cine (2006), y así nos van haciendo entrega de su producción con cuenta gotas. En 2004 salió una colección –Retrovisor- que venía a juntar canciones de los tres previos singles de la banda, aparecidos entre 2003 y 2004. ¿Pero es que esta gente no sacan discos normales? ¿Álbumes?
Cooper debutaron en el año 2000 con el estupendísimo Fonorama, y luego Retrovisor puede considerarse un disco a posteriori, pero hace un par de años escuché a su líder y factótum, Alejandro Díez, decir en una entrevista de Radio 3 que él ya estaba harto del dictado de la industria discográfica y que pasaba de la presión de tener que “dar a luz” un disquito entero cada dos o tres años. Así, el buen hombre argumentaba que lo que pensaba hacer era editar singles o EPs cuando le viniese en gana (sospecho que no vive de esto) y que ya si eso luego la casa de discos (Elefant Records) reuniese las canciones “de éxito” en formato grande. Y esto, amigos, en los tiempos que corren, es tener un par de huevos.
Lo de singles convertidos en discos no es el invento de la pólvora, era lo estándar en el mundo del rock hasta que llegaron los Beatles. Los singles que Cooper facturan son verdaderos EPs de cuatro canciones, casi siempre viene una versión (de Gigolo Aunts, The Muffs, Myracle Brah…) adaptada o no al castellano. Este Alex Díez no viene de la nada, era el cantante del grupo revival mod ochentero Los Flechazos, que igual os suena más. Hoy día los auténticos mods lo repudian (uno me llegó a decir el año pasado “¿Cooper, mod? Su rollo no tiene nada que ver con el nuestro”).
Los Flechazos eran retro retro, es decir, imitaban la música de los años 60, pop, surf, beat, rock de garaje… Cooper hacen power pop, es decir, pop de guitarras deudor del de aquella época, pero no fotocopiado.
En este último EP, además de los cuatro temas de rigor, Cooper nos ofrecen una sorpresa (y por eso creo yo que se ha vendido tanto). Se trata de una quinta “pista oculta” de una hora de duración que contiene un concierto en la sala madrileña Gruta 77. El menú: la crema del pop, versiones de los grupos citados dos párrafos más arriba más Badfinger, Raspberries, The Hollies, Buzzcocks, The Smithereens, Evan Dando, Nacha Pop o los propios Flechazos. Todo por menos de 5 euros.
6 comentarios:
A mí Cooper no me gusta nada (de hecho recuerdo que una vez hasta te regalé un disco suyo porque yo no lo quería), eso sí,no me pierdo un concierto suyo...
Con atraso, porerror, le agadecería un par de títulos sobre la 2ª Guerra Mundial. No tienen por qué ser novelas. Migue.
A mí Los Flechazos me gustan bastante, pero a Cooper no le controlo casi nada, sólo un par de canciones en recopilatorios de Elefant. El caso es que toca en mi ciudad dentro de una semana y este post ha podido abrirme el ánimo investigador...
De todas formas, lo de la lista de singles no sé cómo de engañoso puede ser. Si ya poca gente compra discos, no me imagino cuánta gente compra singles. Yo no conozco a nadie. Igual basta vender cien para ser el número uno de la semana.
Y al hilo de lo de los mods, el otro día estuve en una fiesta con fuerte presencia mod y me preguntaba si escuchan a algún grupo actual, alguien lo sabe?
Suscribo tus palabras porerror.
Sigo a Cooper desde sus inicios, singles, directos, etc.
Hace años también escuché bastante Los Flechazos, pero lo cierto es que algunos de sus discos han envejecido bastante mal.
Cooper en cambio es una banda con todos los tics de un gran grupo pop de guitarras y estribillos. Creo que Alejandro ha sabido maridar perfectamente su poso sixties con una frescura contemporánea que le aleja de cualquier grupo revival sesentero. Se nota que en estos últimos años ha abierto su espectro musical y ha escuchado mucha música contemporánea (¡qué poco mod no!?).
El dictado de las radiofórmulas es más que evidente. Y aunque parezca contradictorio yo creo que en España podría llegar a convertirse en un producto superventas hasta Manolo el del bombo. Lo que quiero decir es que sería suficiente una importante campaña de Marketing.
¿Sabes cuál es la diferencia entre España y Gran Bretaña por jemplo?: La respuesta está en la propia lista de ventas semanal. Quizás una mera cuestión de cultura musical. En Gran Bretaña los que venden son Oasis, Coldplay, Kaiser Chiefs, Franz Ferdinand, etc. y aquí... pues aquí todos sabemos quienes venden. Por poner un ejemplo real extraído del suplemento ep3 de El Pais. Tengo por aquí a mano el correspondiente al 24 de Octubre de 2008:
40 Principales:
1-Melendi
2-La Oreja de Van Gogh
3-Rosario
...
Reino Unido:
1-Keane
2-Oasis
2-Kings Of Leon
...
¿Cómo lo ves?
Saludos
-Fran G. Matute: Sé que Cooper no te gusta y me sorprende, porque en un momento dado tiene las coordenadas de lo que podría gustarte. ¿Puede ser parte de tu rechazo debido a que canten en español?
Sí, tú me regalaste el single "Rabia", descatalogado ya. ¡Me encanta!
-Riggy: Mira, lo de los mods es como cualquier otra "tribu urbana" pero ellos además parecen recrearse en su frikismo/ exclusión. Supongo que les molarán grupos actuales de revival mod o de soul pero es verdad que suelen despreciar otra música heredera de la que a ellos les gusta (esto es una generalización, ¿eh?).
Te recomiendo que vayas a ver a Cooper en directo, tiene que ser muy divertido. Yo todavía no he tenido la suerte, pero pienso que te pueden gustar.
-Xabipop: Veo que estamos de acuerdo en estas valoraciones musicales, y además tú le has puesto el cascabel al gato "sagrado": los discos de Los Flechazos han envejecido bastante mal.
´Tu análisis del tema radiofórmula/lista de éxitos es muy certero. A mí lo que me frustra no es que en España sean éxito determinadas mierdas, sino que otras cosas de calidad no lo puedan ser también.
Gran Bretaña (por seguir con el ejemplo que hemos puesto) es el paraíso de las chorra-canciones novelty, allí es número uno cualquier cosa: una rana haciendo la sintonía de Superdetetective en Hollywood, la canción de unos futbolistas... lo bueno es que luego también lo son los tres grupos que mencionas en tu comentario, que por cierto se han ido sustituyendo el uno al otro en lo más alto de la lista de ventas.
Respecto al tema de las ventas en España (está claro que Cooper habrán vendido 100 copias del EP, pero por lo menos lo han hecho), os dejo este interesante artículo que leí hace tiempo:
http://jenesaispop.com/2008/09/05/en-espana-no-compra-discos-ni-el-tato/
-Migue: Te dejo para el final por haberte salido del tema. Sobre la 2ª Guerra Mundial... depende de lo que busques. El mejor libro que he leído sobre el tema es Stalingrado del historiador inglés Antony Beevor. Trata sobre la batalla de Stalingrado, incluyendo antecedentes y consecuencias, pero es mucho más. No es tan friki o limitado como pueda parecer, y se deja leer muy bien.
Si lo que quieres es una síntesis de conjunto de la Guerra, te recomendaría La guerra que había que ganar de W. Murray y A.R. Millet. Ahora, te advierto que esto es un librazo de Historia de más de 700 páginas.
Hey, he recordado otro libro estupendo sobre el tema. Nápoles 1944: Un oficial de inteligencia en el laberinto italiano. Se trata del diario de un militar inglés en Nápoles inmediatamente después de la invasión aliada. A priori parece un tema muy especialista, pero no: en realidad el libro está lleno de humanidad, comentarios juiciosos, humor, intución y reflexiones sobre la guerra en general y los napolitanos en particular. Se lee muy bien, es corto, barato y divertido, ¡no te digo más que lo suelen tener en la sección de "Libros de viaje"!
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