Cuando el 29 de agosto empecé a leerme la novela gráfica Watchmen (1986-87, de Alan Moore y Dave Gibbons) tenía superclaro que quería terminármela pronto por un motivo: escribir este post. ¿Cómo así, Porerror? Señora, porque es lo mejor desde el chicle. ¿No quedamos en que lo mejor era la serie Perdidos? Pues, en cierto, modo, podría decirse que Perdidos es lo mejor desde Watchmen (y por cierto, que tienen cosillas en común).
Meses ha que el buen Grillo Solitario me daba la tabarra (en el buen sentido) para que me leyera yo Watchmen, sabiendo como sabía, el mamón, que me iba a encantar. Ahora comprendo por qué me sacaba a relucir este cómic cada vez que en Estatuas Verdes se hablaba de superhéroes, sea Batman, Iron Man o La Patrulla-X. Ahora comprendo tantas cosas… Lo que más me ha impresionado de esta obra es su talla, a continuación paso a explicarme.
Los tebeos molan, pero sinceramente, nunca he pensado que pudiesen ser fuente de conocimiento. En otras palabras, entretenimiento sí, pero no alta cultura. Hay cómics megasesudos, y sí, muy vanguardistas estéticamente, todo lo que ustedes quieran. Hay intentos muy buenos, como ese Maus (1980-1991), preciosa fábula ratonil sobre el Holocausto, pero por lo general me pasaba que los tebeos de contenido ideológico me solían parecer groseros (por ejemplo, Paracuellos de Carlos Giménez o V de Vendetta de Alan Moore). Hasta ahora.
Con Watchmen asisto a un fenómeno acojonante: la lectura de una auténtica novela gráfica, contada con el lenguaje del cómic pero que, en la mejor tradición del arte postmoderno, no le hace ascos al pastiche, al humor, al juego, a la parodia, y que toma prestado de las formas de narrar del cine, la literatura o el ensayo. Y todo esto –oh, milagro- con un dibujo puro de superhéroes, pues Watchmen es un cómic de superhéroes. No hay aquí histrionismos manga, ni vanguardias paranoico-metafóricas. Son viñetas rectangulares de colorido convencional, con un dibujo semirrealista que bien podría haber firmado Jack Kirby, Michael Golden o John Romita.
De hecho, si uno pasa rápido las páginas (muchas: la novela gráfica se ensambla con doce episodios bastante jugosos) de Watchmen, se encontrará con algo muy similar al típico cómic de superhéroes ochentero de Marvel o DC. ¿El prodigio, pues? La combinación de este artwork con el guión, magistral guión y diálogos de Alan Moore. Sobre el contenido de esta obra hablaré más bien mañana (hoy me estoy centrando en la forma), pero me atrevería a decir que Watchmen es a las historietas de superhéroes lo que en su día El Quijote fue para las novelas de caballería.
La concepción de la obra es monumental, al tratarse de una serie limitada, la historia tiene sentido completo, y aunque la narración es –más o menos- lineal, asistimos a numerosas analepsis y prolepsis (saltos atrás y adelante) y a un uso portentoso del cinematográfico “montaje en paralelo”. Al final, todo cobra sentido como en una complicadísima obra de relojería, pero durante la lectura del tebeo en más de una ocasión me entró el complejo de no saber qué demonios estaba pasando. Pero todo se explica, y el final, con ser fantástico (en el doble sentido del término) no es una mera patochada ex machina.
Creo que, estructuralmente, el mayor logro de Watchmen consiste en la creación de una distopía, un mundo paralelo con sentido completo, en el que Robert Redford se presenta a la Casa Blanca en 1988, Richard Nixon es el vencedor de Vietnam y la comida rápida predominante en USA es la india. La publicidad, los eslóganes, los pequeños detalles que se repiten continuamente dan cohesión (de hecho, los fondos de las viñetas son importantísimos), y aunque este mundo es propio (los superhéroes que aparecen en Watchmen no salen en ninguna otra obra) se parece demasiado al nuestro.
La historia, por una vez, no es simple. El punto de partida es que aparece un superhéroe muerto, lo que motiva que sus antiguos compañeros de capa y gayumbos vuelvan a ponerse en contacto, y de ahí se deriva una trama de suspense y aventuras al nivel de un Blade Runner (1982) o un Matrix (1998). La peli ya la están haciendo. Estáis avisados.
Meses ha que el buen Grillo Solitario me daba la tabarra (en el buen sentido) para que me leyera yo Watchmen, sabiendo como sabía, el mamón, que me iba a encantar. Ahora comprendo por qué me sacaba a relucir este cómic cada vez que en Estatuas Verdes se hablaba de superhéroes, sea Batman, Iron Man o La Patrulla-X. Ahora comprendo tantas cosas… Lo que más me ha impresionado de esta obra es su talla, a continuación paso a explicarme.
Los tebeos molan, pero sinceramente, nunca he pensado que pudiesen ser fuente de conocimiento. En otras palabras, entretenimiento sí, pero no alta cultura. Hay cómics megasesudos, y sí, muy vanguardistas estéticamente, todo lo que ustedes quieran. Hay intentos muy buenos, como ese Maus (1980-1991), preciosa fábula ratonil sobre el Holocausto, pero por lo general me pasaba que los tebeos de contenido ideológico me solían parecer groseros (por ejemplo, Paracuellos de Carlos Giménez o V de Vendetta de Alan Moore). Hasta ahora.
Con Watchmen asisto a un fenómeno acojonante: la lectura de una auténtica novela gráfica, contada con el lenguaje del cómic pero que, en la mejor tradición del arte postmoderno, no le hace ascos al pastiche, al humor, al juego, a la parodia, y que toma prestado de las formas de narrar del cine, la literatura o el ensayo. Y todo esto –oh, milagro- con un dibujo puro de superhéroes, pues Watchmen es un cómic de superhéroes. No hay aquí histrionismos manga, ni vanguardias paranoico-metafóricas. Son viñetas rectangulares de colorido convencional, con un dibujo semirrealista que bien podría haber firmado Jack Kirby, Michael Golden o John Romita.
De hecho, si uno pasa rápido las páginas (muchas: la novela gráfica se ensambla con doce episodios bastante jugosos) de Watchmen, se encontrará con algo muy similar al típico cómic de superhéroes ochentero de Marvel o DC. ¿El prodigio, pues? La combinación de este artwork con el guión, magistral guión y diálogos de Alan Moore. Sobre el contenido de esta obra hablaré más bien mañana (hoy me estoy centrando en la forma), pero me atrevería a decir que Watchmen es a las historietas de superhéroes lo que en su día El Quijote fue para las novelas de caballería.
La concepción de la obra es monumental, al tratarse de una serie limitada, la historia tiene sentido completo, y aunque la narración es –más o menos- lineal, asistimos a numerosas analepsis y prolepsis (saltos atrás y adelante) y a un uso portentoso del cinematográfico “montaje en paralelo”. Al final, todo cobra sentido como en una complicadísima obra de relojería, pero durante la lectura del tebeo en más de una ocasión me entró el complejo de no saber qué demonios estaba pasando. Pero todo se explica, y el final, con ser fantástico (en el doble sentido del término) no es una mera patochada ex machina.
Creo que, estructuralmente, el mayor logro de Watchmen consiste en la creación de una distopía, un mundo paralelo con sentido completo, en el que Robert Redford se presenta a la Casa Blanca en 1988, Richard Nixon es el vencedor de Vietnam y la comida rápida predominante en USA es la india. La publicidad, los eslóganes, los pequeños detalles que se repiten continuamente dan cohesión (de hecho, los fondos de las viñetas son importantísimos), y aunque este mundo es propio (los superhéroes que aparecen en Watchmen no salen en ninguna otra obra) se parece demasiado al nuestro.
La historia, por una vez, no es simple. El punto de partida es que aparece un superhéroe muerto, lo que motiva que sus antiguos compañeros de capa y gayumbos vuelvan a ponerse en contacto, y de ahí se deriva una trama de suspense y aventuras al nivel de un Blade Runner (1982) o un Matrix (1998). La peli ya la están haciendo. Estáis avisados.
11 comentarios:
Porerror, te recomiendo otra novela que se lee en formato comic (aunque alejada de esos márgenes)por si no la conocieses:
"Berlín, ciudad de piedras"
http://www.planetacomic.net/comics_detalle.asp?Id=3508&cat=1970
A pesar de que el argumento decae a ratos, ya solo por como están dibujadas las viñetas es toda una gozada leerla. Son historias particulares de personajes que se mueven en el Berlín de los últimos momentos de la República de Weimar hasta la llegada al poder del nazismo.
COMO MAMÓN QUE SABÍA QUE TE IBA A GUSTAR QUERÍA HABER SIDO EL PRIMERO EN COMENTAR, PERO DON PYRO SE ME HA ADELANTADO, JEJE.
ME ALEGRA QUE LO HAYAS LEÍDO, SOBRE TODO PORQUE YA NO ME TENDRÉ QUE CALLAR COADA VEZ QUE ME ACUERDE DE ALGO DEL CÓMIC DELANTE DE TI, QUE YA VAN MUCHAS VECES.
POR CIERTO, EL POST GENIAL. GANAS TENGO YA DE LEER EL SIGUIENTE. (Y MUY BUENA LA FOTO-VIÑETA DE LOS HERMANOS MARX :- >> )
Ah! Las novelas gráficas! Habría tanto que decir!
¿Has palpado los engendros de Jodorowsky y Moebius? Hay quien dice que son obras maestras...
Yo no la he leído, pero se me ha venido a la cabeza Arlequín, aquel gran personaje de la quinta de Leonardo Dantés que, antes de tocarse algo con la guitarra, decía: watchmeeeeen...Migue.
me la estoy leyendo ahora mismo!! asi que leer este post entero, comentarios incluidos ha supuesto un riesgo altisimo de spoliers, pero finalmente lo he hecho!
Watchmen es genial, no se me ocurren más palabras ahora mismo, simplemente es genial.
Por cierto que "berlin ciudad de piedras es el siguiente en mi lista"
Aunque no soy mucho de cómics y superhéroes, siempre que me llevan a películas sobre estos "seres especiales" o me explican con detalle algunos de los intríngulis de sus caracteres siento que podría gustarme este género....
Porerror, Grillo Solitario: ¿Sería Watchmen un buen acercamiento o... no way?
KARMEN, ME QUEDO CORTO SI TE DIGO QUE TE RECOMIENDO QUE LEAS WATCHMEN. SIN EMBARGO NO CREO QUE SEA EL MEJOR CÓMIC PARA AFICIONARTE A LOS DE SÚPER HÉROES. NO ES QUE WATCHMEN NO SEA UNO, QUE LO ES, ES QUE ES MUCHO MÁS QUE ESO.
PARA LO QUE DCS TE RECOMIENDO BORN AGAIN ES UN CÓMIC 100% DE SÚPER HÉROES (DARE DEVIL EN PARTICULAR), ESCRITO POR FRANK MILLER (SIN CITY, ENTRE OTRAS).
EL CÓMIC SE PUBLICÓ EN EL 86. EL DIBUJO ES CLÁSICO, Y COLOREADO CON PUNTOS (ASÍ). LA HISTORIA ES TOTALMENTE DE SÚPER HÉROES, Y ESTÁ MUY BIEN HECHA.
ESPERO TE GUSTEN AMBOS :- >>
Gracias a todos por vuestros comentarios.
-pyro: apuntada queda tu recomendación, el cómic delque hablas suena cojonudo.
-Grillo: que te voy a decir, ya no te calles nada relativo a Watchmen, ¡salvo que vaya a ser un spoiler! Gigante el tebeo de las narices, atento estoy a tu próxima recomendación... buscaré el Born Again de Daredevil. The end is nigh...
-Fran G. Matute: he leído muy pocas novelas gráficas, pero visto lo visto, puede que me aficione al medio. ¿Recomiendas las de Moebius o Jodorowsky? Supongo que en las de este último aparecerá gente fustigándose unos a otros con filetes a la plancha, como suele ocurrir en las obras de tito Jodo...
-Migue: siendo como soy fan de los friki-personajes, no me compares a la panda de Tamara & cía. con los vigilantes del crimen de Watchmen. Aunque bien mirado...
-Rukia: qué casualidad, joder!! Tranquila que no iba a poner spoilers. Espero que te esté gustando el libro tanto como a mí. Cuando te lo acabes dejas otro comentario, ¿no? ;)
-Karmen: don Grillo ya te ha contestado mucho mejor de lo que lo iba ahacer yo, pero me sumo a su recomendación. Aunque no es un cómic paradigmático de superhéroes es tan bueno que te lo recomiendo de todas todas, todo el mundo debería leerlo.
Bueno, me refería básicamente a "El Incal" de Jodorowsky (texto) y Moebius (dibujo).
Yo no lo he leído, por lo que no puedo recomendártelo. De hecho te preguntaba por si me lo recomendabas tú a mí.. jejeje...
Me consta que la gente que lo ha leído ha flipado.
Hablando de cómics, el mejor que yo he leído en mi vida es uno de "Wolverine" (1982) titulado "Honor" de Chris Claremont y Frank Miller. Creo que está reeditado en plan edición de lujo.
Grillo & Porerror, muchísimas gracias por vuestras apreciaciones. Empezaré con Daredevil y seguiré con Watchmen. Ya os contaré. :-)
hace eones que acabé watchmen y eones también que no entraba en el blog, por eso con mucho retraso, pero también con muchas ganas escribo en esta entrada, a mi parecer del mejor cómic que he leído. Sí, el mejor. Final apoteósico, trama histórica sobre la guerra fría inmejorable, personaje detestable llamado Dr. Manhattan y héroe y antihéroe por excelencia merecedor del mayor de mis respetos: Rorschach. Resultado?? no se decirlo... es... es...
Publicar un comentario